Normal
0
21
false
false
false
MicrosoftInternetExplorer4
Así comienza el relato que hoy vamos a
compartir.:
“La experiencia comenzó un día como
tantos otros….estaba en la
Fundación con la cuál colaboro, la Fundación Corriente Cálida Humanística, su Fundadora, Cristina Sánchez, anunció que en julio 2010 se hacia la Cruzada Solidaria
a Chaco y que necesitaban colaboración.Me pregunté ¿Cómo puedo colaborar yo?”
JULIETA KAPUSTIANSKY nunca
había hecho trabajo comunitario y a raíz de un taller de liderazgo que realizo
comprendió el valor que tiene realmente.
Hoy, la visión de vida de Julieta ha cambiado totalmente.
Juli continúa:
“Pensé que se me haría difícil, no sabía
por donde empezar, pero empecé, llame a mis conocidos, puse carteles y paso lo
maravilloso! recibía respuestas, llamados, ayuda!!! dije si puedo!!y seguí para
adelante juntando cosas, recibiendo donaciones que llevábamos todos los sábados
a la casita donde se juntaban las donaciones. Allí entre mate y charla
embalamos todo ¡Cuánto trabajo! pero que satisfacción!!!
Partimos de Buenos Aires el 26 de julio
de madrugada, 2 camiones, 3 camionetas ,1 auto; cargados de mercadería y sobre
todo amor, ganas de ayudar, de hacer diferencias.
Después de horas y horas de viaje, mate,
risas, charlas, llegamos al impenetrable, allí estábamos! parecía increíble ver
todo lo q habíamos logrado ¡!
No voy a detenerme en contar paso a paso
lo q hicimos, sino lo que sentí.
El trabajo en equipo fue impecable, guiados
por Cristina Sánchez.
Todo salió sobre rieles, cada uno cumplió
su función sin quejas, sin no puedo, era maravilloso ver como cada uno sacaba
lo mejor de si, sin importar el cansancio, el hambre o el calor, todos teníamos
el mismo objetivo…que todo salga perfecto! y así ocurrió.
Repartimos comida, ropa, herramientas,
semillas a los lugareños que nos miraban extrañados, no parábamos un minuto de
trabajar, siempre cantando, haciendo chistes, para que las horas de espera
fueran más amenas.
Después de una semana de arduo trabajo en
este viaje, la misión estaba cumplida.
Cuando pude ir digiriendo todo lo que
viví, lo que vi, me di cuenta que si, que habíamos ayudado, que hicimos la
diferencia, porque demostramos que se puede, que hay gente que da, sin esperar
a cambio, que no fuimos por un voto, por una propaganda, fuimos por el simple
echo de dar, de ayudar y ellos lo vieron, lo sintieron, lo vivieron. “
Así que cuando se acaben las provisiones,
ellos tendrán aun nuestro amor”